Dodo Teatro , la enciclopedia libre

Dodo Teatro es un grupo teatral de Buga (Colombia) fundado en mayo de 2012 por Bray Salazar. Está conformado por un equipo artístico multidisciplinar,^[1]​ con miembros provenientes de áreas como la literatura, la comunicación social, la historia, la fotografía, la ilustración y, por supuesto, el teatro. En su trabajo escénico, centrado principalmente en el teatro de sala, han explorado los lenguajes y las narrativas transmedia para potenciar la experiencia del espectador.^[2]​

Sus montajes más notables han sido "Nimbus: El Pueblo de las Nubes"^[3]​, "La vida que seremos"^[4]​y "Sukker, INC.", todos apoyados por el Ministerio de Cultura de Colombia.

El grupo comenzó como una promotoría cultural de la Alcaldía Municipal de Buga en enero de 2012.^[5]​ Los ensayos se realizaban en la Antigua Estación del Ferrocarril, cuyos salones nocturnos y solitarios favorecían un trabajo teatral aislado y constante. Con el tiempo, los procesos formativos y creativos de la promotoría de teatro tomaron cierto renombre local en cabeza de Bray Salazar, licenciado en Arte Dramático de la Universidad del Valle. Más que espacios de diversión o distensión, la promotoría de teatro se convirtió en un lugar de encuentro para las personas que experimentaban una curiosidad seria por el arte teatral. El grupo decidió nombrarse a sí mismo como "La Estación", por el lugar en donde ensayaban.

Los montajes de los primeros años revelaban una preocupación por formar una base actoral sólida que apuntara hacia la formación de un grupo profesional. Montajes como "El avaro" (2012), "El enfermo imaginario" (2013) y "La importancia de llamarse Ernesto" (2014) dieron cuenta de una aproximación más convencional y formativa al teatro, que de una búsqueda artística. El público bugueño, sin una tradición o formación teatral, acogió positivamente las puestas en escena, que se planteaban desde la comedia, un elemento reiterativo en las propuestas escénicas del grupo. Aún no había una preocupación por la realidad social o las posibilidades del lenguaje teatral.

En 2015, el grupo decidió separarse del proceso de las promotorías culturales de la Alcaldía, y emprender el camino hacia la independencia y la profesionalización. De esta época datan algunos miembros de la base actual del grupo, como Ana Hurtado, Edward Valencia y Julián Benítez. Aún conservaban el nombre de "La Estación" y los ensayos se realizaban de manera nómada: casas de los integrantes, espacios municipales, bares y parques. En mayo de 2017 deciden darle un giro al proceso, rebautizar el grupo como "Dodo Teatro" y alquilar una casa como sede con dineros aportados por los mismos integrantes, pues el grupo aún no producía ingresos con sus montajes escénicos.

El nombre de Dodo Teatro hace referencia a un ave endémica de las islas Mauricio, cuya fragilidad ante la llegada de los europeos la llevó a su extinción a fines del siglo XVII. El dodo se convirtió en un símbolo de la extinción provocada por humanos. El teatro, en Colombia, ha sufrido durante muchos años las consecuencias de la industria masiva del entretenimiento; el buen teatro se ha reducido a un pequeño dodo que hoy pocas personas tienen la oportunidad de conocer. Dodo Teatro acogió este símbolo y transformó su quehacer, en la búsqueda de un horizonte profesional y artístico al nivel de compañías teatrales más grandes. El primer montaje de esta etapa fue "Nuestra Señora de las Nubes" (2017), obra que años después sería reinterpretada por el grupo para crear "Nimbus: El Pueblo de las Nubes" (2021), un montaje profundamente enraizado con la ruralidad de Buga y su historia política y social. Con una base actoral más consolidada y un público local formado desde el 2012, el grupo comenzó a cobrar entradas y a generar pequeñas temporadas de microteatro en su sede y en espacios no convencionales, como una casona del centro histórico y un bar de la misma zona. En 2018 abordaron dos autores de la literatura en habla inglesa: Tennessee Williams y George Bernard Shaw, y dieron un paso más allá del trabajo actoral, con el abordaje del diseño escenográfico.

En 2019 ya había cambiado de casa dos veces, siempre con la intención de llegar a consolidar un espacio escénico con oferta permanente. Los montajes de este año ("Farsa y justicia del señor corregidor" y "El origen de las maneras de mesa") exploraron el diseño de luces y la ambientación musical y sonora, dos nuevos elementos que se sumaban a la búsqueda expresiva de Dodo Teatro. A inicios de 2020, el grupo se constituye legalmente, con el objetivo de acceder a convocatorias públicas y darle más formalidad y organización a su trabajo creativo.

Esta nueva etapa del grupo supuso una consolidación definitiva del equipo base y el inicio de labores en el terreno de la gestión cultural, principalmente liderada por Edward Valencia, comunicador social y periodista de la Universidad del Valle. Un nuevo horizonte se abría para Dodo Teatro: ahora sus actividades no se limitarían a la creación artística, sino a la gestión de su propio trabajo entendido en un circuito más amplio de ofertas culturales. Esto implicó, primero, que los miembros observaran y redescubrieran la pertinencia social del trabajo teatral del grupo, y, segundo, proyectarse más allá de Buga, en la búsqueda de convocatorias privadas y públicas con las cuales financiar sus montajes escénicas. Poco después de crear la Corporación, Wuhan, la ciudad china, comenzó a sonar en todos los noticieros colombianos. Se aproximaba la transformación más radical que ha vivido Dodo Teatro.

Debido a la pandemia de COVID-19, Dodo Teatro detuvo sus reuniones y ensayos presenciales en marzo de 2020 y dio un salto a la virtualidad. Adaptó sus encuentros pedagógicos, prácticos y creativos al universo de las videollamadas.^[6]​ Lejos de querer filmar sus puestas en escena para transmitirlas por video, el grupo ahondó en las posibilidades eventualmente dramáticas que podía detonar el uso creativo de los nuevos medios tecnológicos y las mediaciones^[7]​ que los atravesaban, haciendo un análisis desde la cibercultura. Una vez optimizadas las estrategias digitales para el desarrollo de las actividades del grupo, comenzaron una serie de lecturas dramáticas en las que invitaban a los espectadores a unirse a través de una videollamada.^[8]​ Con el paso de las semanas, transformaron estas lecturas dramáticas en lo que denominaron montajes teatrales en escenarios virtuales, en un intento por darle nombre a su actividad emergente. El primero montaje de este tipo fue una adaptación para la plataforma Google Meet que hicieron de su propio montaje presencial de "La orgía" (de Enrique Buenaventura).^[9]​

En adelante, realizaron más montajes para escenarios virtuales en plataformas de videollamadas, mudándose pronto a Zoom, por su abanico más amplio de herramientas. En agosto de 2021 ganaron una convocatoria con el Ministerio de Cultura, con la cual pudieron darle forma a su primer proyecto transmedia: "El Show de la Familia Perry".^[10]​ Para este montaje, continuaron usando el dispositivo de las videollamadas, frente a la situación de aislamiento social y con la intención de conectar en directo con el público. Además, dieron su primer paso en las narrativas transmedia. Crearon una página web con contenidos audiovisuales, sonoros, fotográficos y literarios que expandían el universo dramático de la obra, al tiempo que le permitían al espectador-usuario encontrar pistas para el enigma que planteaba la historia de los Perry.

Luego, vino una segunda experiencia con el teatro transmedia, esta vez a través de un montaje presencial. "Nimbus: El Pueblo de las Nubes" supuso el regreso a las tablas en 2021, cuando la pandemia empezó a amainar por el inicio de las vacunaciones. Este montaje, que aborda el tema del conflicto armado que vivió la zona rural montañosa de Buga^[11]​ a través de una serie de escenas concatenadas sobre el exilio político y la pandemia, contempla dos elementos transmediales: una puesta en escena itinerante y una página web que alberga un mapa en donde los espectadores-usuarios pueden explorar el pueblo y acceder a contenidos audiovisuales, sonoros, gráficos, fotográficos y literarios sobre el universo de la obra. Este montaje fue bien recibido por los medios de comunicación regionales^[12]​^[2]​^[13]​^[14]​ y ha circulado tanto en Buga y sus zonas rurales, como en el centro del Valle del Cauca.

"La vida que seremos" supuso una tercera aproximación a los lenguajes transmedia, esta vez a partir de un montaje ya existente. La estrategia adoptada esta vez fue la creación de unos diarios, unas cartas y unos recetarios de los personajes, que les permitirían a los espectadores-usuarios profundizar en el universo de la violencia familiar planteada por la obra y entender de otra manera la historia. Así, la página web transmedia brindaba una perspectiva diferente sobre los personajes, gracias al baúl y al álbum que se diseñaron digitalmente.^[4]​

Para realizar su actividad artística, Dodo Teatro detectó la necesidad de un modelo de autosostenimiento financiero que no dependiera de las convocatorias públicas para arte y cultura, pero que tampoco alejara al grupo de su objetivo primordial: el teatro. Durante muchos años, como todos los grupos de teatro, crearon sus montajes escénicos a partir de dineros que conseguían realizando rifas y vendiendo comida. Sencillamente la taquilla no cubría todos los gastos. Depender de los dineros públicos tampoco era viable. Entonces, el grupo optó por crear un modelo propio de autosostenimiento financiero a partir de souvenirs que se derivaban de los mundos transmedia que creaban. La hipótesis de partida era que una obra de teatro transmedia, por disponer de más contenidos creativos además del escénico, generaba afectos más duraderos con el público, que estaría dispuesto a adquirir souvenirs inspirados en estos universos ficcionales que iban más allá del escenario. Diseñaron vasos con fotografías del lugar real donde se inspiró "Nimbus: El Pueblo de las Nubes", agendas inspiradas en la estética de bául y de álbum de "La vida que seremos" y separadores de libros basados en el mundo televisivo de "El Show de la Familia Perry".

En esta búsqueda de productos significativos, se aliaron con Hábito Café y crearon Telón Arriba: un café para encontrarnos. La unión de ambos mundos radicaba en la idea de que, por un lado, el teatro es el arte del encuentro y, por otro, el café ha venido a convertirse en una bebida que también reúne a las personas. Así como las palomitas son el producto por excelencia del cine, Dodo Teatro apostó por convertir el café en la bebida de sus propuestas teatrales. Pero para ello, debían contar con su propio espacio, en donde desplegar con libertad sus experiencias dramáticas.

En enero de 2022, Dodo Teatro asumió la creación de un Centro Cultural, en asocio con la Corporación Palabra Activa (una iniciativa de narración oral escénica). El objetivo principal era tener un espacio independiente para ensayar, montar obras y guardar escenografía y utilería. La casa que consiguieron, ubicada a pocas cuadras del Teatro Municipal de Buga, era amplia, con muchas habitaciones, de techos, puertas y ventanas altas, paredes de adobe y corredores extensos: típica casona de la época hispánica en Colombia. Dadas estas condiciones, decidieron adaptar un escenario de formato mediano dentro de la casa y, además, abrir talleres artísticos al púbico.

Actualmente, el Centro Cultural quiere convertirse en un referente alternativo para las artes locales, principalmente el teatro.

• "El avaro", de Molière (2012)
• "El enfermo imaginario", de Molière (2013)
• "Las mujeres son cosa de mujeres y los hombres también", de Ana Maugeri (2014)
• "La autopsia", de Enrique Buenaventura (2014)
• "La importancia de llamarse Ernesto", de Oscar Wilde (2014)
• "La trampa", de Luigi Pirandello (2015)
• "La orgía", de Enrique Buenaventura (2016)
• "La ahogada", "El oso", "La prueba" y "El arreglo", de Antón Chéjov (2017)
• "Nuestra Señora de las Nubes", de Aristides Vargas (2017)
• "Así mintió él al esposo de ella", de George Bernard Shaw (2018)
• "El caso de las petunias pisoteadas", de Tennessee Williams (2018)
• "Hombres en escabeche", de Ana Istarú (2018)
• "El origen de las maneras de mesa", de Marco Antonio de la Parra (2019)
• "Farsa y justicia del señor corregidor", de Alejandro Casona (2019)

• "El Show de la Familia Perry", montaje transmedia para escenarios virtuales inspirado en "(Estamos) en el aire", de Marco Antonio de la Parra (2020)
• "Nimbus: El Pueblo de las Nubes Archivado el 23 de enero de 2022 en Wayback Machine.", montaje transmedia inspirado en "Nuestra Señora de las Nubes", de Aristides Vargas (2021)
• "La vida que seremos", montaje transmedia inspirado en "El origen de las maneras de mesa", de Marco Antonio de la Parra (2021)
• "Sukker, INC.", montaje transmedia inspirado en "Un enemigo del pueblo", de Henrik Ibsen (2022)